Es una técnica que se usa para identificar las fortalezas, las oportunidades, las debilidades y las amenazas del negocio o, incluso, de algún proyecto específico. Si bien, por lo general, se usa muchísimo en pequeñas empresas.
Es una herramienta simple y, a la vez, potente que te ayuda a identificar las oportunidades competitivas de mejora. Te permite trabajar para mejorar el negocio y el equipo mientras te mantienes a la cabeza de las tendencias del mercado.
Fortaleza-Strengths
Referente a las iniciativas internas que funcionan bien. Se podría comparar con otras iniciativas o con un costado competitivo externo. Al analizar estas áreas puedes entender qué es lo que ya funciona. Entonces, puedes aplicar esas técnicas que sabes que funcionan bien, las fortalezas, en otras áreas que puedan necesitar un refuerzo extra como la mejora de la eficiencia del equipo.
· Analizar tus ventajas competitivas.
· Evaluar tus recursos.
· Monitorea tus logros.
· Consulta a tus clientes.
· Analiza tus procesos internos.
Debilidades-Weaknesses
Referente a las iniciativas internas que no funcionan como es debido. Es una buena idea analizar las fortalezas antes que las debilidades para generar referencias de lo que significa el éxito y el fracaso. La identificación de las debilidades internas ofrece un punto de partida desde el cual mejorar los proyectos.
· Evalúa tus procesos internos.
· Revisa tus recursos.
· Estudia tus finanzas.
· Consulta a tus clientes.
· Analiza a tus competidores.
Oportunidades-Opportunities
Es el resultado de las fortalezas y las debilidades, junto con cualquier iniciativa externa que te colocará en una posición competitiva más sólida. Podría ser cualquier cosa, debilidades que quisieras mejorar o áreas que no se hubieran identificado en las primeras dos etapas del análisis.
· Analiza tu mercado.
· Actualízate en tendencias y desarrollos tecnológicos.
· Haz un análisis de mercado.
Amenazas-Threats
Se refiere a las áreas que tienen el potencial de causar problemas. Difieren de las debilidades en que las amenazas son externas y, por lo general, están fuera de nuestro control. Pueden ser eventos como la pandemia o un cambio en el panorama competitivo.
· Analizar el mercado.
· Evalúa las condiciones socioeconómicas que rodean a tu empresa.
· Actualízate sobre regulaciones y cambios legislativos.
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